Cuando ella huye… huye como una amante esquiva.
Escribo y escribo, palabras, líneas, párrafos cada vez más grandes y más vacíos, leo y es pura mierda, y es que tanto me indigna que lo mando al infierno de un solo borrón, la piedad me la dejo en casa.
Miro a otros mundos, salidos de otras cabezas, de la imaginación de algún ser brillante que sepa despertar la inspiración, pero nada, lo único que se despierta es el pesimismo ¿Por qué yo no puedo hacerlo?
A todos nos pasa, mira a los artistas, a ellos no les sienta bien perder a sus musas, ¿Por qué tengo que ser yo diferente? Me duele perder la inspiración, pero más me duele tener que buscarla en ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario